LA ARTISTA VALLISOLETANA AMAYA BOMBIN REALIZARÁ UNA PERFORMANCE DURANTE TODA LA JORNADA DEL DIA EUROPEO DE LA CREATIVIDAD ARTÍSTICA EN UN ESCAPARATE DE UN COMERCIO DE VALLADOLID
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LA ARTISTA VALLISOLETANA AMAYA BOMBIN REALIZARÁ UNA PERFORMANCE DURANTE TODA LA JORNADA DEL DIA EUROPEO DE LA CREATIVIDAD ARTÍSTICA EN UN ESCAPARATE DE UN COMERCIO DE VALLADOLID
La artista Vallisoletana Amaya Bombín (Valladolid, 1977) se sumará a los actos del DIA EUROPEO DE LA CREATIVIDAD ARTÍSTICA, que se celebrará el próximo día 21 de marzo, con la perfomance [ Red ] una propuesta que llevará a cabo en el escaparate de CASINO en la calle Santiago de Valladolid, esquina a Atrio de Santiago.
La artista se situará dentro del escaparate con un caballete y dibujará a los paseantes anónimos que se paren frente a ella. Los retratos serán dibujos a línea, con lápiz rojo, de las siluetas de la gente. Serán dibujadas de forma rápida y continua con un solo trazo. La performance tendrá una duración de todo el día en horario comercial y se documentará con fotografías, vídeo y una stop-motion.
Cómo surgió la idea
La inspiración de esta performance viene dada por la estancia de la artista dibujando en el Museo del Prado. “Todos los días estoy con un caballete, dibujando y rodeada de gente anónima que se para a observar cómo dibujo cuadros de retratos. También todos los días paso frente a las Meninas y pienso que quizá Velázquez también quería pintar a todo el mundo que se pusiese delante de él. Sin obligaciones, sin prejuicios, sin ningún interés económico, etc... simplemente, poder retratar a todo el mundo. Quizá por ese motivo -olvidándonos de todas las teorías que se han escrito al respecto, pero sin despreciarlas- se retrató a él mismo con pincel en mano y mirándonos. De más está decir la cantidad de gente que diariamente pasa delante de su pincel, gente de lo más dispar y que tranquilamente posan para él.También me inspiró la iniciativa que CreArt desarrolla en los comercios de Valladolid. En esa interesante iniciativa, ponen códigos bidi con información de artistas locales por distintos escaparates de la ciudad”.
¿Conocemos a los artistas de nuestra ciudad? ¿Cómo acercar su labor al público, yendo a su
encuentro más allá de las puertas de la galería, el museo o la sala de exposiciones?
Este proyecto llama la atención de la gente sobre el trabajo que realizan los artistas en general y sobre el que llevan a cabo los artistas de su propia ciudad en particular. Para ello juega con el desplazamiento de la actividad artística a lugares concurridos y no asociados tradicionalmente con la práctica o la exhibición artística, produciendo un efecto sorpresa que irrumpe en el devenir cotidiano de las personas por el centro de Valladolid.
La capacidad creativa del ser humano se encuentra detrás de todo aquello que nos sorprende y nos llama la atención. Incluso cuando lo que nos atrapa es, por ejemplo, un paisaje donde nadie ha intervenido: quien observa e interpreta también tiene que poner su creatividad en juego ante ello. Por eso esta performance también pone de relieve la importancia del papel del público en toda actividad artística. Una participación que no tiene lugar simplemente en la sala de exposición, sino que forma parte del trabajo de la artista en todo momento.
En la historia del arte ya es una imagen tradicional la del artista que sale con su caballete a pintar al aire libre. También lo es la del retratista que trabaja en largas sesiones con su modelo en el estudio. Por otra parte, desde el siglo XX la labor de artistas en el diseño de estrategias de publicidad y venta —desde la concepción de un envoltorio a la creación de un escaparate o de toda una tienda— es analizada y valorada por la disciplina. Esta performance combina todos estos aspectos de la actividad artística para llamar la atención y mostrar al público un aspecto de la misma que generalmente permanece oculto cuando nos relacionamos con una pintura: la intervención en red de la artista.
Podríamos verlo como un juego de espejos donde la transparencia del cristal del escaparate permite acercarse a una faceta del objeto artístico no siempre evidente para todos. Para ello, en lugar de mostrar la superficie pictórica al público se coloca el caballete de manera que ésta permanezca oculta; la atención de los espectadores se dirige a la artista y a la relación que hay entre ellos mismos y la obra (puesto que la artista estará retratando a quienes se acerquen al escaparate).
Esto último se pone en evidencia de dos modos complementarios: poniendo un cartel en el escaparate donde se indique al público que le están retratando [ cartela con información sobre la obra así como la indicación de dónde podrán ver la obra terminada después del Día dela Creatividad], y colocando un espejo tras la artista donde se reflejen los propios espectadores (pero no los dibujos).
Esta performance es además un guiño a toda una tradición de presencia de espejos en pintura que va desde obras como El matrimonio Arnolfini de Van Eyck a Las Meninas de Velázquez. Por supuesto también el pintor que pinta un cuadro vuelto de espaldas al público forma parte de toda una tradición en la historia del arte donde Las Meninas (de nuevo) o el retrato dela Familia de Carlos IV de Goya tienen un papel muy destacado. No se trata simplemente del juego de “mostrar al retratado”, o de hacer retratos exprés de los viandantes, también se trata de poner de relieve que incluso cuando los artistas trabajan solos en su estudio, el “resto del mundo” está ahí siempre de un modo u otro y participa, condiciona y conforma la creación artística. La creatividad es pues una capacidad donde dialogan lo individual y lo colectivo.
Amaya Bombín (Valladolid, 1977) es licenciada en Bellas Artes porla Universidad de Salamanca y se especializó enla Hertogenbosch Art School (Holanda). También es Técnico Superior en Gráfica Publicitaria porla Escuela de Arte de Salamanca y trabajó en publicidad como directora de arte en Madrid y Lisboa.
Ha obtenido importantes becas comola Becade Artes Plásticas enla Real Academiade España en Roma (2009-2010),la Becadela Fundación Botínpara el curso de Francisco Jarauta (2011) ola Beca CreArt(2013).
Su obra artística es multidisciplinar y se ha mostrado nacional e internacionalmente. Los últimos años ha focalizado su obra en torno al tema raíces, sujeto a los conceptos de pertenencia, identidad y antepasados.
Entre los proyectos que ha realizado fue becada por el Ayuntamiento de Palma de Mallorca (Residencia CRIdA, 2012), colaboró en los talleres deLa Fundación JoanMiró (Palma), impartió un taller para el proyecto italiano BComeBlog, clausuró con una performance el Ciclo de Arte Contemporáneo en el Claustro de Bramante (Roma), estuvo de Residencia artística en Delft (2013), desarrolló con un permiso especial el proyecto “Baroque roots” en el Museo del Prado durante 2013 y desarrollará una inminente residencia artística este año 2014 en Cádiz.